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En el año 2346 se ablirán los trabajos manuales para los humanos, sino han desaparecido antes. Hemos viniendo delegando esas tareas a esclavos, esclavos negros, inmigrantes... Cuanto todos hayan subido el peldaño social para librarse como lo estamos haciendo ahora los españoles en España, los robots estarán desarrollados y el relevo será definitivo.

Comentario dejado por mí en ésta noticia de Menéame a cerca de ésta noticia: Fabricante de zapatos "contrata" robots para gestionar su almacén. Un poco tontería, la verdad, pero bueno, por aquéllo de imaginar un posible futuro.

A medida de irme dando cuenta del avance de la tecnología, y de la evolución social en el terreno de los trabajos, he llegado a esta conclusión. Es algo que siempre ha ocurrido, los trabajos menos deseados por la gente que obstenta el poder han sido relegados a las clases más bajas e indefensas. Y da igual quienes hayan sido, primero los esclavos en el imperio romano y otros esclavos distintos en posteriores imperios. Con la abolición de la esclavitud, surge otro tipo de gente dispuesta a realizar esos trabajos.

Pero el mundo se hizo más complejo y el número de ese tipo de trabajos más inferiores aumentó. Inmigrantes que llegaban a la ciudad para trabajar en fábricas, o inmigrantes de paises empobrecidos que llegan a los más pujantes en su época. Da igual, a quien se le es más fácil explotar, se le explota, y es una exigencia del sistema de clases.

Después de esta constante en la sociedad, se abre una nueva era. Ya se ve en los nuevos sistemas automatizados de producción industrial, en los que la mano de obra humana se ha reducido considerablemente. Son los actuales trabajos menos deseados por la sociedad: el sector primario y el secundario. Para los que pueden elegir, generalmente eligen el sector terciario. Sin embargo eso no quiere decir que la gente deje de elegir esos sectores, sino que queda relegado a una minoría, que por cierto se enriquece bastante al tener a pocos que repartir (agricultura, propietarios de tierras).

¿Pero que pasa cuando llegamos a un punto en el que todo el mundo puede elegir?, siendo esa la tendencia a la larga, si es que el mundo se encamina hacia un futuro más igualitario a escala internacional. Pues que esa igualdad llegaría justo a tiempo, con una solución recién inventada. El trabajo mecánico, de robots, de automatización. Mano de obra que no se queja, el final de esa carrera por dejar de ser los inferiores, puesto que las máquinas no poseen tal aspiración de grandeza y justicia social.

Sin embargo ese escenario plantea ciertos problemas. Los empleos de la gente corriente serían los que no pudieran suplir las máquinas, empleos humanísticos, artísticos, culturales... allí donde la mera producción material no llega. Pero no se necesitan tantos trabajos de ese modo, incluso del sector terciario, el del trato personal con el cliente, para vender por supuesto. Porque se necesitaría de una sociedad completamente consumista, comprometida con el mantenimiento de la economía que sustenta con su consumo diario.

Que este es el punto al que, en menor o mayor medida hemos llegado ya, una civilización débil en nuevos aspectos, necesitamos seguir comprando, para mantener empleos, si no hay crisis. Necesitamos seguir quemando petróleo, todo para continuar con algo que no nos lleva a ningún sitio, quizá una gran crisis por el agotamiento de lo que sostiene todo. Esto es insostenible.

Un dato, en los 90, en Japon, Nissan empezo un proyecto para la construcción de una fabrica de automoviles, el proyecto que hizo a escala para evaluación consiguió una fabrica 100% automatizada, entraban camiones por un lado con componentes y salian coches fabricados por el otro lado y solo se necesitaba una persona para el control de la fabrica. El Gobierno Japones cuando tuvo conocimiento de dicho proyecto mandó su cancelación.

Comentario del forero Eduard en este hilo de ForoCoches. Bueno, esto evidencia que esos dilemas entre automatizar o conservar puestos de trabajo ya asoma por la puerta. Y cuando la primera opción, la más novedosa, aparece, la historia ha demostrado que termina cobrando importancia. Y es muy probable que en cierta medida acabe imponiéndose, y más en un mundo tan capitalizado en el que tienen cada vez más importancia las grandes multinacionales, para las que los trabajadores son menos importantes que en las pequeñas o medianas empresas.